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Migración a la nube para empresas y negocios
Encontrar un aliado tecnológico que ofrezca apoyo en el camino hacia el Cloud Computing es esencial
Además de ofrecer más flexibilidad, eficiencia, agilidad y nuevas oportunidades para innovar, el ‘viaje’ a la nube se aceleró durante el último año por cuenta de la pandemia y la necesidad de las empresas de digitalizarse y transformarse.
¿Cómo realizar una migración a la nube?
Las razones de su creciente popularidad no son difíciles de comprender. La primera es que los tiempos de implementación son relativamente cortos (meses o, en algunos casos, horas), cuando con las tecnologías tradicionales una implementación similar puede tomar de 2 a 3 años; el retorno sobre la inversión -que los expertos llaman ‘time to value’- es muy rápido; y, finalmente, pero no menos importante, está la facilidad de uso, ya que sus orígenes se remontan al mundo del consumidor, con Amazon, eBay, Yahoo y Google.
No sorprende entonces que algunos estudios recientes, como el realizado por la firma de investigaciones Everest Group Research, sostengan que más del 90% de las compañías en el mundo ya ha adoptado alguna forma de cloud.
Sin embargo, una migración apresurada y sin una estrategia clara puede terminar costándole mucho más al negocio, generando un mayor consumo -y costo- de las aplicaciones legadas a un ritmo alarmante. De hecho, un grupo importante de empresas tiene, en promedio, entre el 20% y el 40% de sus cargas de trabajo en la nube, principalmente las más fáciles y menos complejas, dice un estudio de la consultora Accenture. También revela que casi dos tercios de los encuestados indicaron que, hasta ahora, no habían logrado los resultados que esperaban de sus iniciativas.
Por todo esto, encontrar un aliado tecnológico que ofrezca apoyo y acompañamiento en el camino hacia la nube es esencial para tener éxito en el proceso. Por eso, antes de comenzar su migración a la nube, tenga en cuenta los siguientes aspectos clave:
1. Desarrolle una estrategia de Migración a la Nube
Lo primero es establecer los objetivos. Tener una comprensión básica de su situación lo ayudará a establecer indicadores clave de rendimiento (KPI) de migración a la nube, como los tiempos de carga, los tiempos de respuesta, la disponibilidad, el uso de CPU, el uso de memoria y las tasas de conversión.
El desarrollo de la estrategia debe realizarse temprano y de una manera que priorice los objetivos comerciales sobre la tecnología; estas métricas permitirán la medición en una serie de categorías.
¿Cuál es la combinación adecuada (como servicio) de infraestructura (IaaS), plataforma (PaaS) y software (SaaS) que se adapta a sus necesidades? ¿Cómo se trasladan los requisitos de su infraestructura corporativa existente a este nuevo mundo de la nube? Y en este punto no basta solo con definir el modelo a emplear. También es importante saber de qué manera la organización tendrá que elegir entre ambientes administrados de nube pública, privada o híbrida, los cuales le den flexibilidad y seguridad a su operación.
2. Identifique y prepare sus aplicaciones
Es posible que algunas aplicaciones, especialmente las más modernas que haya creado en los últimos años, ya estén listas para pasar a la nube. Algunas pueden requerir una modernización más significativa para actualizarlas con APIs o marcos más modernos.
Por último, es posible que no sea necesario mover algunas aplicaciones, porque usted puede decidir reemplazarlas con soluciones ‘nativas de la nube’ más nuevas disponibles en la actualidad. Es importante catalogar minuciosamente y priorizar las aplicaciones que planea mover a la nube.
Un análisis de su arquitectura y una mirada cuidadosa a sus aplicaciones pueden ayudar a determinar qué debe migrar.
3. Consiga el proveedor adecuado
La migración a la nube no puede estar en manos de cualquiera. Asegúrese de contar con un proveedor que cuente con la experiencia, la atención y sea capaz de administrar las tareas complejas necesarias para llevar a cabo una migración a la nube. Aunque los trabajadores tarde o temprano regresarán a las oficinas o a un modelo híbrido, la forma en que se hacen los negocios ha cambiado para siempre. Y la nube es parte esencial de la nueva normalidad.
4. Adopte la nube
La fase final consiste en permitir que sus usuarios finales o clientes utilicen las aplicaciones en la nube. Por lo general, se requieren esfuerzos de capacitación y administración de cambios para garantizar la adopción exitosa del usuario final en el nuevo entorno de nube. Además, invierta en metodologías ágiles; la velocidad de las actualizaciones en la nube permitirá una cadencia más ágil de lanzamiento de mejoras más pequeñas, pero más frecuentes, que continuarán impulsando la adherencia y la adopción del usuario.