Ciberseguridad, un ‘dolor de cabeza’ que se puede mitigar

19 Abril 2022

Es difícil encontrar empresas que no tengan algún tipo de presencia en la red en la actualidad. Estar en internet se ha convertido en una necesidad para las organizaciones de todos los tamaños, entendiendo las bondades que la digitalización acarrea para el crecimiento de los negocios.

Esta presencia en la red, a pesar de sus múltiples ventajas y beneficios, también viene acompañada de riesgos que las compañías tienen que enfrentar en el día a día. No importa si hablamos de un pequeño emprendimiento que tiene una página web y algunas cuentas en redes sociales, o si se trata de una gran organización que demanda grandes plataformas digitales o servicios de almacenamiento, todas las empresas deben tener la ciberseguridad como una prioridad.

Y es que los incidentes de ciberseguridad pueden generar graves consecuencias al interior de las organizaciones. Un reciente informe del Foro Económico Mundial (WEF) señala que en las grandes organizaciones una brecha de ciberseguridad tiene un costo promedio de 3,6 millones de dólares, mientras que el tiempo de identificación y recuperación ante un ataque puede llegar a ser de hasta 280 días.

Existe una larga lista de amenazas a las que las empresas tienen que hacer frente a diario en la red. Los tipos de ataques que generan mayor preocupación incluyen el ransomware, que consiste en el secuestro de información y equipos por parte de cibercriminales; y la suplantación de identidad o phishing, en el cual los atacantes usan engaños para que colaboradores de las organizaciones hagan clic en un enlace malicioso, entreguen sus contraseñas o den acceso a sus equipos.

Una reciente encuesta realizada por la firma KPMG señala que más del 80% de las empresas consultadas sufrieron al menos un ciberataque en los últimos 12 meses. El informe sugiere además que en América Latina las empresas tienen programas de gestión del riesgo de fraude menos robustos.

Los riesgos de ciberseguridad a los que se enfrentan las empresas aumentaron por cuenta de la pandemia, la cual forzó a muchas organizaciones a migrar a modelos de trabajo remoto y a implementar nuevas herramientas digitales para mantener sus operaciones activas.

En este contexto, en el que los ataques cibernéticos son cada vez sofisticados, todas las empresas deben contar con algún tipo de estrategia de ciberseguridad. Sin embargo, ningún plan puede garantizar la seguridad de la organización si no se capacita a los equipos de trabajo para que tengan prácticas seguras en materia cibernética.

Expertos en seguridad señalan que los colaboradores de las organizaciones deben ser la primera línea de defensa contra ataques informáticos, por lo que las inversiones que realicen las empresas para capacitar a sus equipos son determinantes para que estas estén mejor preparadas para hacer frente a posibles amenazas.